Según un artículo publicado esta semana en news.com.au, un nuevo informe señala que los niños australianos deberían consumir cinco veces más nutrientes omega-3 de lo que están tomando.
El informe “Scientific Consensus Report”, elaborado por un grupo australiano de expertos en nutrición, señala que cada día los niños consumen unos 50 a 100 miligramos de nutrientes de cadena larga omega-3, que se encuentran principalmente en el pescado azul. Pero, según el informe, para un desarrollo cerebral y sanitario óptimo, los niños de más de 13 años deberían estar tomando 500 miligramos al día de dicho componente alimentario.
En el informe, elaborado por el grupo de salud del centro The Omega-3, se cita un estudio de New South Wales del 2004 en el que se encuestó a 5500 estudiantes de edades comprendidas entre los 5 y los 16 años y se observó que un amplio porcentaje de los niños consumían pescado menos de una vez por semana.
Resulta preocupante, señala el autor del estudio, dado que los omega-3 desempeñan un papel importante en la salud ósea, el desarrollo cerebral y conductual, el aprendizaje y el estado de ánimo.
Según la directora del centro Omega-3 y nutricionista Wendy Morgan, se debería incrementar este nutriente en la dieta de los niños para beneficiar su salud en general.
«Los omega-3 de cadena larga son nutrientes esenciales para una serie de funciones de la salud, y el informe demuestra que son requeridos por todas las células del cuerpo», señala Morgan. «Desempeñan una función importante en el desarrollo cerebral y el aprendizaje, y cada vez hay más pruebas de su papel en la salud ósea, el asma y el estado de ánimo».
Los niños podrían incrementar la ingesta de omega-3 simplemente comiendo más alimentos del mar, añade Morgan. «(Los niños) no toman suficiente pescado y marisco… no se pueden obtener suficientes nutrientes omega-3 sin tomar alimentos del mar».
El informe también hace un llamamiento al Gobierno para que revise su política de nutrición y tenga en cuenta el papel fundamental de los omega-3 de cadena larga en la salud y el desarrollo de los niños. Los nutrientes omega-3 de cadena larga se encuentran también en alimentos comunes como el salmón, los mejillones, los huevos, el pavo o la carne de vaca.
Fuente: News Au