Los alimentos adecuados pueden potenciar el efecto de los fármacos
Según un artículo publicado esta semana en BBCNews, expertos oncólogos de la Universidad de Chicago ha afirmado en la revista Journal of Clinical Oncology que combinar las medicinas con los alimentos adecuados podría mejorar la eficacia de los fármacos y reducir los costes del tratamiento.
Los comentarios se basan en una investigación que indica que tomar un fármaco para el cáncer de mama con alimentos grasos, en lugar de con el estómago vacío, impulsa la absorción del fármaco, lo cual implica que los pacientes podrían tomar dosis más pequeñas, reduciendo los costes.
Previamente, los expertos habían advertido acerca de los posibles riesgos de las interacciones entre fármacos y alimentos. Según ellos, estas interacciones podían hacer que los fármacos se volviesen tóxicos o menos eficaces.
Sin embargo, los profesores Mark Ratain y Ezra Cohen afirman que los últimos resultados acerca de las interacciones entre alimentos y fármacos para el tratamiento del cáncer se podrían aprovechar para ayudar a reducir los costes e incrementar los efectos beneficiosos de dichos fármacos.
Los investigadores observaron que tomar el fármaco lapatinib (TYKERB) con alimentos, en lugar de con el estómago vacío (como se sugiere en el prospecto), incrementa un 167% la presencia del fármaco en el cuerpo, lo que significa que el fármaco podría resultar más eficaz. Al tomarlo con alimentos ricos en grasa los niveles ascendieron hasta un 325%.
Según Ratain, bebiendo al mismo tiempo zumo de pomelo, que se sabe que incrementa la velocidad con la que algunos fármacos llegan al flujo sanguíneo, podría incrementar aún más estos porcentajes.
Por ejemplo, uno de los efectos secundarios del lapatinib es la diarrea, que se cree se produce a causa de la parte de fármaco que no se absorbe, por lo que tomar dosis más pequeñas con alimentos que impulsen su absorción ayudaría a reducir estos efectos.
Sin embargo, los autores advierten que los pacientes deben evitar realizar sus propios experimentos y señalan que es necesario realizar más investigaciones para evaluar los efectos de estas combinaciones en pacientes. Por su parte, ya están realizando un estudio para analizar los efectos de combinar un fármaco con el zumo de pomelo.
Según Cohen: «Si llegamos a entender la relación entre, por ejemplo, el zumo de pomelo y fármacos de uso frecuente, como las estatinas, un fármaco que millones de personas toman a diario para prevenir enfermedades coronarias, podríamos ahorrarnos una fortuna en costes».
La Dra. Joanne Lunn, nutricionista de la British Nutrition Foundation, está de acuerdo en que es necesario investigar más al respecto, ya que la dieta y los fármacos pueden interferir entre sí de muchas formas.
Fuente: BBC