Funcionamiento de la tiroides

28 de octubre de 2013

Funcionamiento de la glándula tiroides.

Funcionamiento de la tiroides

Las hormonas tiroideas son sintetizadas por la glándula tiroides.

El correcto funcionamiento de estas hormonas provoca un aumento del metabolismo y el consumo de oxígeno. También aumentan la síntesis de proteínas en casi todos los tejidos del organismo, con lo que estimulan el crecimiento y la maduración celular (ósea, encefálica, muscular…)

Esto es lo que ocurre si el funcionamiento de la tiroides es el normal pero, ¿Qué ocurre cuando esto no es así?

  • Hipertiroidismo: Se puede dar por distintas causas. El tipo más frecuente se produce por una estimulación incontrolada del tiroides que produce mayor cantidad de hormonas tiroideas. Provoca pérdida de peso repentina, nerviosismo, problemas para conciliar el sueño y fuertes sofocos.
  • Hipotiroidismo: También se produce por diferentes alteraciones que producen un descenso en la producción de hormonas tiroideas. Como consecuencia de ello, descenso del calor corporal y la frecuencia cardiaca, se produce aumento de peso, fatiga, cansancio generalizado, sequedad en la piel y descenso de la actividad motora e intelectual.

Los problemas de tiroides, aunque se asocian con otros déficits de nutrientes, se relacionan mayormente con una baja ingesta de yodo. El organismo no produce yodo por lo que su concentración depende de la ingesta. Una enfermedad que se da en áreas donde existe un déficit de yodo (como pueden ser las zonas alejadas del mar) es el bocio endémico, enfermedad en la que se puede producir un aumento desproporcionado del tamaño del tiroides.

Para acabar con esto se introdujeron (en España y otros muchos países) diferentes programas para promover el uso de sal yodada en lugar de sal común. El resultado de esos programas fue un acusado descenso en los déficits de yodo. El problema es que a día de hoy el consumo de sal yodada se ha reducido por lo que sería conveniente realizar campañas de manera periódica para aumentar su uso.

Una forma de hacerlo podría ser la obligatoriedad del uso de sal yodada en los comedores escolares para evitar problemas en la infancia como por ejemplo retraso mental o problemas relacionadas con el crecimiento.

El consumo de yodo debe ser el recomendado (120-150 µg/día) ya que una ingesta muy elevada de yodo puede producir un exceso de hormonas tiroideas que produzca tirotoxicosis o  un descenso de las mismas como ocurre en el hipotiroidismo.

En próximos posts hablaremos de como podemos valernos de la alimentación para tratar estos aspectos.

Referencias: 

1. OMS. Organización Mundial de la Salud. Yodación de la sal [Internet]. [Actualizado 10 Jul de 2013]. Disponible en: http://www.who.int/elena/titles/salt_iodization/es/

2. Villa Ll. Prevención y control de la deficiencia de yodo en España. Rev Esp Salud Pública. 2008;82(4):371-377

Autor: Lorenzo Gómez.

Deja un comentario