Importancia buena alimentación preescolar
Cuándo los pequeños inician una dieta completa a partir de los 2 años, debemos tener especial atención con los hábitos en la alimentación, horarios de comidas, distracciones y diversión a la hora de conocer y probar alimentos nuevos, frutas y verduras de cada temporada, etc etc. Tanto es así que se han llevado a cabo distintos estudios sobre la alimentación preescolar entre los 2 y 5 años.
A lo largo de estos años los pequeños sufren grandes cambios en el metabolismo y fisico de su cuerpo. Por norma general, los niños entre su primer y tercer año engorda unos 4Kg y crece unos 20 centímetros; por norma general, a partir del año empiezan a dar sus primeros pasos y su desgaste físico es mayor; también influye la incorporación al colegio o guardería a partir del año o dos años, dónde comienza a llevar una rutina más estricta o incluso un menú escolar si comen en el colegio. Todo esto influye, ¿cómo llevar la alimentación preescolar?
Las claves para que un niños de entre 2 y 5 años disfrute y coma bien son, entre otras:
- A la hora de comer todo deben ser sonrisas y buenos gestos, este momento no debe suponer peleas.
- El ambiente a la hora de la comida debe ser tranquilo y relajado, sin prisas ni presiones
- Todos los niños deben desayunar, el desayuno es fundamental para activarse y remontar los niveles de glucosa tras las horas de descanso.
- Suprimir el consumo de bebida estimulantes o gaseosas, pues causan actividad pero hacen que disminuya la concentración.
- Medio litro de leche al día es fundamental y, si al niño o niña no le gusta la leche, ésta debe ser sustituida por otro lácteos como los yogures, batidos, flanes…
- Hidratos de carbono presentes en el desayuno y el almuerzo son fundamentales, pues son una fuente de energía perfecta para los niños. Algunas ideas serían: pan, cereales, galletas, frutas… Completos, sanos y los hacemos divertidos.
Alimentos en edad preescolar y escolar
Cuándo los pequeños empiezan el colegio e inician su andadura en el mundo escolar necesitan seguir unas pautas, conductas y métodos para adecuar la alimentación, el ritmo escolar y la vida familiar en el día a día para conseguir el equilibrio perfecto y así conseguir el mayor y mejor rendimiento escolar. ¿Cómo conseguir un buen rendimiento en un niño?
Durante los dos primeros años de la vida de un niño y hasta los 5 o 6 años, el cerebro desarrolla el mayor crecimiento y, a partir del quinto año, el crecimiento continúa pero a un ritmo muy inferior. Lo que buscamos, sobretodo, en los primero años de colegio es que los niños sean capaces de concentrarse, recordar, analizar, pensar y memorizar. Todo ello complementado con las buenas conductas y hábitos en el aula y en las relaciones con los compañeros. Por ello es necesario:
- Vitaminas y Minerales
- Glucosa, el desgaste físico de los niños y la actividad debe compensarse con una alimentación equilibrada en azúcares. Es muy importante, en este punto, el consumo de fruta y miel; además del azúcar, chocolate…
- Qué un niño de socialice correctamente favorecerá su alimentación y, por lo tanto, su rendimiento escolar y capacidad de retención.
- La mala alimentación en los primeros años tiene una causa – efecto con la obesidad infantil, creciendo de manera significativa el volumen de células grasas, lo que derivará en enfermedades crónicas como la diabetes, entre otras.
- Ejercicio físico y dieta equilibrada son la combinación perfecta. Disfrutar de las tardes de parque con los compañeros corriendo y jugando al aire libre es muy importante para el mejor descanso, mejor alimentación y socialización de los pequeños… todo ello dará un resultado positivo en el rendimiento y concentración escolar.