Mantener unos hábitos alimenticios adecuados en el trabajo puede resultar difícil. Según una nueva encuesta de Working Mother Media, 8 de cada 10 mujeres coinciden en que el acceso a alimentos adecuados y nutritivos a la hora de la comida y de los aperitivos les ayudaría a controlar mejor su peso y vencer los malos hábitos alimenticios en la oficina.
Sin embargo, aunque más del 80% de las mujeres encuestadas están de acuerdo en que la nutrición es importante, reconocen que solo prestan de vez en cuando atención a las elecciones de alimentos que realizan.
Prácticamente todas las mujeres encuestadas coinciden en que tanto la saciedad como la comodidad son importantes para los alimentos que toman en el trabajo. A continuación se indican algunas recomendaciones para mantener una rutina alimentaria saludable durante la semana:
- Acostúmbrate a llevar la comida. Prepárala la noche anterior asegurándote de llevar una comida equilibrada. Puedes incorporar carne, pollo, pavo, jamón, pescado, huevos, queso bajo en grasa, un yogur desnatado y frutos secos.
- Elige alimentos ricos en proteínas y fibra. Muchas mujeres afirman pasar hambre todo el día mientras trabajan. Este tipo de alimentos ayudan a sentirse lleno y controlar los niveles de apetito para no pasarse el día picando.
- Prueba una fruta o vegetal nuevo cada semana. Si se elige lo mismo por rutina día tras día, puede acabar aburriendo. Prueba cosas nuevas para mantener tu interés en las comidas de diario.
- Hidratate. Conviene tener agua a mano para mantenerse sano. Sustituye por agua el zumo, los refrescos, el café o cual sea tu bebida habitual.
- Defiende la iniciativa en el trabajo, animando a los directivos de tu empresa a promover unos hábitos alimentarios saludables en el entorno de trabajo. Puedes sugerir que incluyan una oferta más amplia de alimentos saludables en la cafetería de su lugar de trabajo o en las máquinas expendedoras.