Consejos, trucos e ideas para llevar fritos en el tupper
Cuándo preparamos el tupper para llevarnos al trabajo, muchas veces nos cuestionamos el tema de los fritos. Pues bien, éstos en ocasiones pierden textura, se ablandan, se humedecen si cerramos el tupper en caliente o incluso cambian su sabor, es por esto que aquí os dejo unos consejos que uso para el tupper de fritos.
Por ejemplo, las empanadillas: Son un frito ¿a qué si? Cuándo las llevamos de un sitio para otro, el truco perfecto para que la parte de abajo no quede reblandecida y siga teniendo ese crujir tan característico es usar papel de cocina a la hora de escurrirlas, guardarlas frías y no cerrar el tupper hasta que no esté frío y, en la base de la fimabrera poner otro trozo de papel de cocina.
Carne empanada: Otro clásico entre los fritos, en este caso, fritos empanados. Pues bien, se puede tomar tanto fría como caliente. Si está fría la notaremos algo más dura y, si la calentamos en el micro se queda el pan como pasado ¿Qué hacemos para llevar en el tupper carne empanada? Lo mejor es calentarlo en el microondas pero en Grill y, si en la oficina tenemos mini horno u horno mucho mejor, ya que no hará tanto vapor y se calentará con el grill.
Con las croquetas, boquitas de mar rebozadas y todas esas elaboraciones que hacemos con pan rallado sucede lo mismo que en el caso de la carne empanada o pechugas empanadas.
Los rebozados y gachas. Este es otro tema más delicado, ya que resulta muy complicado que se mantega con el crujir, por no decir casi imposible, por ello yo nunca recomiendo llevar gachas, buñuelos y ese tipo de rebozados en el tupper pero… si nos sobran de la noche anterior, como aquí ¡¡no se tira nada!!… Lo que hacemos es no meterlo en la nevera y usar el horno o micro para calentar pero siempre con el grill porque sino se harán excesivamente blandos.
Patatas fritas. Otro clásico… ¿Como hacerlas para mejor resultado en el tupper? Para mi la mejor manera es hacer patatas fritas a mini cuadraditos, es la forma más cómoda de llevarlas y la forma de tomarlas sin estar pasadas. Cuándo las freímos yo las cambio varias veces de papel para que quede el menos aceite posible. A mayor cantidad de aceite, más se reblandecen luego.
Estos son algunos consejos que utilizo para no tirar nada de lo que queda en casa y disfrutar de la comida en la fiambrera como si fuese comida recién hecha.
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