¿Cuales son los almuerzos más saludables para mis hijos?
La vuelta al cole ya está aquí!! Si, ya se han acabado los días de playa y piscina y tanto a niños como a mayores nos toca volver a la rutina del día a día.
En verano las comidas se suelen hacer diferentes y los niños comen diferente, en la mayoría de los casos, a como suelen hacerlo el resto del año. Pero al volver al colegio se deben recuperar de nuevo las rutinas, sobre todo, alimentarias a las que el niño deberá ir adaptándose poco poco otra vez.
Una de las ingestas que suele estar menos controlada es el almuerzo, ya que es cuando están solos y comen lo que los padres les preparan en casa. En muchos casos incluso no comen bien y por eso es necesario que esta comida sea tanto de su agrado como que sea equilibrada y saludable para ayudar a su mejor desarrollo físico e intelectual.
Para que las opciones sean las más saludables para tus hijos, estas son algunas ideas:
1. Fruta de temporada. La mejor fruta que se puede consumir, tanto por su sabor como por la calidad nutricional de la misma, es la que nos da la propia temporada, por que es su mejor época y por tanto el fruto conservará mejor sus cualidades. Puedes preparársela a tus hijos para almorzar ya cortada y lista para que sea abrir y comer.
2. Cereales integrales. Los cereales son una apuesta segura con los niños, aunque en ocasiones no tenemos muy claro cuales pueden ser los mejores para su alimentación y lo cierto es que la industria alimentaria a veces nos lo pone un poco difícil para saber identificar cuales son los más saludables y seguros. Sobre todo hay que tener muy en cuenta la cantidad de azúcares y grasas añadidos.
Una muy buena opción es la grano casera, con la que además se pueden hacer barritas de cereales que resultan muy cómodas para que los niños se lleven al cole.
3. Gelatinas naturales. Se pueden hacer de miles de sabores y además poniendo trocitos de frutas para que sean más completas. Para que los niños se las puedan llevar al cole, pueden hacerse en envases herméticos individuales. Esta opción puede ser muy útil también para la merienda y sobre todo en niños que no aceptan demasiado bien la fruta al natural. Además la gelatina es un alimento muy indicado para fortalecer sus ligamentos y ayudar en su crecimiento. [Ver más en:
Recetas de gelatina]
4. Una versión sana del típico sándwich. Para que le guste a los niños el sándwich no tiene porque ser poco saludable y aportar muchas calorías en forma de grasas. Se pueden utilizar otros rellenos como por ejemplo pechuga de pavo o pollo sin sal, queso fresco, atún al natural con tomate…Y una versión diferente y muy original puede ser la nutella vegana.
5. Batidos naturales. Continuamos con la fruta y sus innumerables beneficios, que además son imprescindibles para la salud de los más pequeños. Pero el problema viene cuando no les gusta la pieza de fruta tal cual, lo que hace que consumir fruta sea una tarea muy difícil. En estos casos se puede optar por el batido que además se puede combinar con leche e incluso cereales, para hacer un almuerzo muy saludable. [Ver más en:
Batidos de frutas]
6. Dulces caseros. Hay niños muy delicados y selectivos en cuanto a su alimentación, lo que limita mucho a la hora de darles de comer o de preparar una dieta variada y que además resulte equilibrada. Estos niños además suelen tener devoción por los dulces industriales y los alimentos precocinados. Para evitar que su alimentación se base en estos productos, podemos hacerlos nosotros mismos en casa. El resultado siempre será más saludable que el industrial y además puede servir de gran ayuda para que tus hijos participen en su realización y se interesen por la cocina y el tiempo en familia.
7. Frutos secos. Los frutos secos son una opción muy saludable para tus hijos, ya que aportan muchas vitaminas y antioxidantes necesarios y además grasas de tipo insaturado como los ácidos grasos esenciales Omega 3. Si es para niños menores de 3 años se aconseja que se den molidos para evitar posibles atragantamientos. También se pueden utilizar los frutos secos para formar parte de un bizcocho, acompañados de yogur o como parte de la granola para hacerla más completa.
Como ves las opciones son infinitas y no significa por ello que tengamos que limitarnos a lo típico que nos piden los niños, que la mayoría de las veces no es lo más saludable.
Con unos pocos cambios tendrás listo un almuerzo de campeones para tu pequeño!
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