Un estudio reciente realizado para identificar los posibles beneficios de la “vitamina del sol” para salud indica que los hombres con unos niveles bajos de vitamina D tienen un elevado riesgo de infarto, siendo 2,5 veces más propensos a sufrir un ataque al corazón que los hombres con unos niveles más elevados de vitamina D.
«Aquellos con un nivel bajo de vitamina D, además de tener un riesgo más elevado de infarto en general, mostraron un riesgo particularmente elevado de infarto mortal», señaló el autor del estudio el Dr. Edward Giovannucci de la Harvard School of Public Health y el Brigham and Women’s Hospital de Boston.
En el estudio, publicado en la revista Archives of Internal Medicine, participaron 454 profesionales de la salud de edades comprendidas entre 40 y 75 años que habían sobrevivido a un infarto o bien que habían fallecido a causa de una enfermedad coronaria, además de otros 900 hombres sin historial de enfermedad cardiovascular. Tras haber tomado muestras de sangre para medir sus niveles de vitamina D, se les realizó un seguimiento durante 10 años.
Los investigadores compararon a los que tenían un nivel deficiente de vitamina D (no más de 15 nanogramos por mililitro de sangre) con los que estaban en el extremo inferior del rango normal (al menos 30 nanogramos por mililitro de sangre).
El cuerpo humano fabrica vitamina D cuando se expone la piel a la luz del sol; se encuentra también en el pescado azul, como el salmón, y la leche suele estar enriquecida con ella.
La vitamina D ayuda al cuerpo a absorber el calcio y se considera importante para la salud de los huesos. En adultos, una deficiencia de vitamina D puede dar lugar a una osteoporosis y, en niños, a raquitismo. Pero algunos estudios recientes han indicado que la vitamina D podría ofrecer otros beneficios para la salud, como proteger de a algunos tipos de cáncer (incluidos el de colon y el de mama), de la enfermedad arterial periférica y de la tuberculosis.
Según Giovannucci, hay suficientes pruebas del valor de la vitamina D como para animar a las personas a comprobar si sus niveles son normales. Para ello, afirma, basta con pedirle al médico que nos haga un análisis de sangre. Los que tengan unos niveles demasiado bajos pueden tomar suplementos de vitamina D, señaló Giovannucci.
«Hay muchas personas con niveles bajos de vitamina D», añadió Giovannucci.
Según él, la vitamina D podría protegernos del infarto de varias formas, como disminuyendo la tensión arterial, regulando la inflamación, reduciendo la calcificación de las arterias coronarias, afectando a la musculatura del corazón o reduciendo las infecciones respiratorias en el invierno.
Fuente: Reuters