Consejos para el controlar la cantidad que comen los niños
Es importante llevar un control de nuestras propias porciones y enseñar a los niños a que hagan lo mismo. Además de prestar atención al tamaño de las porciones, probar algunos de los siguientes consejos:
Utilizar platos o cuencos más pequeños. Los niños son más propensos a servirse porciones de mayor tamaño cuando utilizan platos o tazones más grandes. Utilizar platos más pequeños ayuda a controlar las porciones dando, al mismo tiempo, la impresión visual de que hay más comida. Al igual que los adultos, suelen comer más con los ojos que con el estómago. Lo que implica que suelen comer más de lo que necesitan.
Evitar el síndrome de «saco sin fin». Las bolsas grandes de patatas fritas y otros aperitivos contienen incontables raciones. Los niños son propensos a tomar varias raciones si se les da la oportunidad. Comprar una bolsa pequeña de una ración o, simplemente, repartir una o dos raciones en un cuenco pequeño.
No poner comida extra en la mesa. Mantener la comida fuera de la vista. Eso les dará la oportunidad de ver si realmente han quedado con hambre después de acabar su ración, en lugar de simplemente servirse un poco más de forma automática porque está sobre la mesa.
Utilizar el sentido común al comer fuera. Los restaurantes tienden a poner raciones enormes. Si los niños son lo suficientemente jóvenes, tratar de elegir algo del menú para niños. También se puede pedir un entrante. O que dos (o tres) niños compartan un plato principal. No caer en la tentación de pedir la bebida o la ración de comida gigantes sólo porque apenas cuesta unos céntimos más. La «oferta» pierde rápidamente su valor si tenemos en cuenta que triplica las calorías de la familia.
Evitar el síndrome de «limpiar el plato». Antiguamente era habitual que nuestros padres nos obligaran a terminar toda la comida del plato antes de poder levantarnos de la mesa. Hoy en día, los expertos están de acuerdo en que esto envía un mensaje equivocado. Es importante enseñar a los niños a seguir sus propias señales de hambre, y a parar cuando se sienten llenos, no cuando el plato está vacío.
Planificar tres comidas saludables y uno o dos bocadillos sanos durante el día. Saltarse una comida a menudo lleva a comer en exceso durante la siguiente.
Añadir más ensaladas y frutas a la dieta familiar. Esto puede ayudar a controlar el hambre y dar una sensación de saciedad, mientras se controla la ingesta de calorías.
Limitar las distracciones. Animar a los niños a sentarse a la mesa para todas las comidas y meriendas. Es más fácil comer de más (o comer muy poco) cuando están distraídos con un vídeojuego o la TV. También es bueno enseñar a los niños a que se tranquilicen, coman despacio y disfruten (y saboreen) los alimentos. Las comidas pueden ser una buena forma de reunirse y pasar juntos un tiempo agradable. Consejos recogidos de Portion Control and Tips for Kids
Relacionado con ayudar a los niños a controlar raciones de comida:
HOla Manuel:
Tienes razón, a veces es muy defícil perder peso, por mucho que se intente.
Yo con lo que me cuentas, que estás haciendo deporte, cosa importantísima, seguiría los trucos que te indicamos en este blog y de otro que te voy a decir.
Al final del blog, verás que hay unos enlaces relacionados. Entra en el que dice "Adelgazar niños". Ahí te indicamos lo que puedes y no puedes comer y de que manera.
Con estos dos blogs tienes toda la horientación, que necesitas para perder peso. Si así no lo consigues, siempre puedes ir a tu médico de familia y preguntarle a él.
Saludos.
Assumpta-Euroresidentes
De verdad es que me cuesta perder peso después del verano. Hago ejercicios y como poco pero los resultados no son muy buenos. Alguién me puede aconsejar una dieta efectiva que da resultados rápidos. Ya lo sé, no existe la dieta milagrosa….