Una pizca de chile rojo en la cena ‘mantiene los accesos de hambre a raya’
Condimentar la dieta diaria con una pizca de chile rojo o guindilla troceado podría ayudar a los que cuidan su peso a frenar el apetito.
Investigadores de la Universidad de Purdue, en Indiana, descubrieron que la capsaicina, que da a los pimientos su ardor, puede reducir el hambre y aumentar el gasto energético. «Hemos descubierto que el consumo de la pimienta de cayena puede ayudar a controlar el apetito y quemar más calorías después de una comida, especialmente en las personas que no consumen la especia de forma regular», señaló el profesor Richard Mattes.
El estudio, publicado en la revista Physiology & Behaviour, midió los efectos de la especia en media cucharilla de pimienta de Cayena; una cantidad que la mayoría de la gente puede soportar.
Otros estudios han examinado el consumo de capsaicina por medio de una cápsula, pero el estudio más reciente demostró que en realidad la degustación de la pimienta de cayena puede optimizar sus efectos.
Este estudio utilizó pimienta de cayena seca molida ordinaria. La cayena es un chile, que está entre las especias más consumidas en el mundo. La mayoría de los chiles, pero no todos, contienen capsaicina.
Veinticinco personas de peso saludable –13 a las que les gustaba la comida picante y 12 a las que no– participaron en el estudio de seis semanas.
En general, el consumo de chile aumentó la temperatura corporal y quemó más calorías mediante un gasto de energía natural.
El estudio observó que aquellos que no comían chiles regularmente experimentaban, además, una disminución del hambre, en especial por los alimentos grasos, salados y dulces.
Fuente: Daily Mail
Relacionado