El horno microondas es uno de los electrodomésticos con mayor penetración en los hogares españoles, muy versátil, fácil de limpiar y, además, muy eficiente. De hecho, según datos del IDAE (Instituto para la Diversificación y Ahorro de la Energía del Ministerio para la Transición Ecológica español) prácticamente 3 de cada 4 hogares españoles tienen un microondas en casa.

Aunque existen desde los años 50, su uso se popularizó en los 70, y en la actualidad son muy asequibles, eficientes y fáciles de usar. Su funcionamiento es muy simple: el microondas calienta o cuece los alimentos sin producir calor, generando un campo electromagnético de alta frecuencia que hace vibrar las moléculas de agua que contienen los alimentos, elevando su temperatura y provocando que se caliente todo lo demás. Estas ondas son similares a las de la radio, por lo que no tienen ningún efecto residual más allá del calor que producen.

Gracias a esto, con el microondas podemos descongelar, calentar, asar, cocer al vapor… En resumen, podemos cocinar un alimento muy rápido y empleando menos energía: de hecho, como apunta el IDAE, podemos ahorrar un 60% de la energía al emplear un microondas frente a un horno convencional en las preparaciones que elaboramos en el día a día. Por ejemplo, se puede asar una calabaza en ocho minutos, frente a los 40 minutos que necesitamos en un horno, o hacer brócoli al vapor en 4 minutos, mientras que en una olla al vapor se necesitan 10 minutos. Y es que gracias a su temporizador se puede controlar bien el tiempo, lo que se traduce en eficiencia y ahorro energético.

Cheesecake ligera de naranja al micro, de NuritmicaFit

Aunque el microondas se usa para calentar alimentos en muchos hogares, sus usos van mucho más allá: se pueden tostar bacon o jamón, hacer un bizcocho, derretir chocolate y ¡hasta hacer huevos fritos! Te proponemos varias recetas y preparaciones que te mostrarán todo lo que puedes hacer con el microondas:

Patatas cocidas al microondas con alioli, de José Villalta
  • Cenas y aperitivos en pocos minutos: en 20 o 30 minutos se pueden elaborar varios platos para despertar el apetito o para tomar una cena ligera, como quiches, berenjenas rellenas o mini timbales de verduras, cuscús o risotto. Usando moldes de silicona o un plato pequeño se puede hacer huevo frito en microondas, y además se pueden asar verduras muy rápido, con vaporeras de silicona o usando recipientes compatibles con este electrodoméstico, tapando los vegetales con film. Con este truco se pueden hacer incluso unas alcachofas al microondas que quedarán en su punto en pocos minutos.
Alcachofas al microondas, de Conchy Domper Franco
  • Postres rápidos: si te apetece una receta dulce, el microondas reduce mucho el tiempo de espera para tener un postre exquisito listo para comer… ¡Y es muy fácil! Lo importante es usar recipientes compatibles con el microondas, y teniendo eso en cuenta se pueden hacer brownies, galletas, muffins… ¡Y mucho más! Por ejemplo, en pocos minutos puedes elaborar una tarta de queso al microondas o hacer unas manzanas asadas en microondas (que puedes usar como guarnición para carnes o tomarlas calientes, acompañadas con helado). Además, se pueden elaborar tartas del mismo tamaño de las que se pueden preparar en un horno convencional o mug cakes (tartas a la taza), aprovechando todas las recetas de bizcocho en microondas disponibles en la comunidad.
Bizcocho de zanahoria sin gluten hecho en microondas, de Sandra M.

Como ves, el microondas es un electrodoméstico con muchas aplicaciones en la cocina, muy eficiente en el uso de la energía y muy rápido. Así que no dejes de compartir con la Comunidad de cocina casera Cookpad tus ideas para sacar partido al microondas en la cocina.