Cómo sobrevivir a tu primer día de gimnasio

Con la vuelta a la rutina también vuelve la temporada de los buenos propósitos y entre ellos está…Hacer deporte! Es común que el verano haya causado estragos y la báscula haga acopio de ello, pero siempre estamos a tiempo de ponerle remedio, sobre todo y nos lo planteamos lo antes posible y añadimos a nuestras rutinas diarias.

1. Sé autónomo. No me refiero al aspecto laboral ni mucho menos, si no a que tomes tus propias decisiones y no te limites a empezar a hacer deporte, o cualquier otra cosa, porque no puedas ir acompañado de tu amigo del alma. Conforme vas madurando y adquiriendo nuevas responsabilidades, lo más normal es que tus horarios cambien y sean más particulares, esto hace que tu tiempo libre sea en momentos del día en los que solo te venga bien a ti, pero eso no debe hacer que no lo dediques a hacer deporte ni mucho menos. Dedicarte tu propio tiempo y más si es para ganar en salud es la mejor opción.

2. Ponte tus metas. Esta claro que el primer día que empieces a hacer deporte no puedes esperar ver resultados al día siguiente, pero poniéndote pequeñas metas poco a poco irás consiguiéndolo y esa gratificación será justo lo que te motivará aun más a continuar con otras metas mayores.

3. Se positivo. Cuando entras por primera vez al gimnasio es normal que te encuentres con personas que llevan haciendo ejercicio casi desde que nacieron, diría yo, y hace que tus expectativas de cambio se mermen un poco. Pero no todo está perdido, has dado el paso de ir al gimnasio, ya estás allí y vas a darlo todo sacando la mejor versión de ti mismo!

4. Adios a la pereza. Habrá días, sobre todo lo más fríos de invierno, que lo que menos te apetezca al salir de trabajar o estudiar sea irte al gimnasio, pero piensa en lo mucho que te ha costado llegar hasta ahí y visualiza tus cambios desde que diste el paso de apuntarte al gimnasio. Eso hará que tu motivación resurja de sus cenizas y te impulse a calzarte las zapatillas y salir a quemar toda la energía del día.

5. Ten claros tus objetivos. Lo más importante a la hora de tener siempre buena disposición y estar motivado, es tener claro cuales son tus prioridades haciendo deporte, desestresarte y evadir la mente, bajar de peso, fortalecerte…En definitiva estar más sano y conforme vayas viendo que poco a poco esos aspectos que querías cambiar han ido mejorando te reafirmarás en que la decisión de apuntarte al gimnasio fue la mejor que podrías haber tomado.

Hacer deporte acompañado de una dieta saludable y estilos de vida igualmente sanos siempre serán una decisión acertada. Te proporcionará salud en todos los sentidos y verás como tu vida mejora…Te hacen falta más motivos?

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