Agricultura saludable y recomendaciones en la dieta

17 de diciembre de 2013

Profundizando en la agricultura saludable y las recomendaciones en la dieta

Influencia de la agricultura, las fuentes de alimentos y sus ingredientes en la salud

Se ha publicado recientemente un informe elaborado a partir de la reunión que tuvo lugar en el Centro Bellagio de la Fundación Rockefeller en el lago de Como (Ilalia), entre el 29 de octubre y el 2 de noviembre de 2012 , en la que participaron 19 expertos de 9 países diferentes, entre los que se encontarban distinguidos médicos, nutricionistas, agrónomos, ecomonistas, expertos en política, abogados, representantes de la industria y representantes de la Agencia de Estados Unidos para el desarrollo Internacional (USAID), la Organización Panamericana de la salud (OPS), y la Fundación WK Kellogg.

Aunque son muchas las sustancias de la dieta que pueden afectar a la salud, la reunión se centró principalmente en aquellas de las cuales se tienen pruebas científicas que demuestran la relación más fuerte y donde el impacto en la epidemia de enfermedades no transmisibles en todo el mundo es mayor.

Principales temas en los que se centró la reunión

  1. La agricultura saludable es necesaria para adaptar la cadena alimentaria a la erradicación de deficiencias y desequilibrios nutricionales graves.
  2. Las ciencias médicas, nutricionales y agronómicas deben ser independientes de los intereses comerciales.
  3. Son necesarias nuevas formas de agricultura, como la ecológica y la urbana.
  4. Las futuras guías alimentarias deben basarse en la ecología (incluyendo el clima) y en la nutrición.
  5. Las investigaciones en nutrición deben ser la base de la investigación en ciencias de los alimentos, y no al revés como pasa ahora.

Aunque estos fueron los temas principales de la reunión, se hizo enfásis en:

  • El papel político en la composición de los alimentos que consumen las poblaciones.
  • Importancia del equilibrio entre omega-6 y omega-3 en la dieta y consumo excesivo de fructosa y sus efectos perjudiciales sobre el crecimeinto y desarrollo infantil así como sobre el desarrollo de enfermedades crónicas.
  • Importancia de elaborar tablas nacionales de composición de alimentos.
  • Diferencias y similitudes entre los paises más ricos y los que se encuentran en vias de desarrollo.
  • El papel de la genética. Las interacciones gen-dieta deberían considerarse en todos los estudios en los que se relaciona la salud con la dieta y con enfermedades como la diabetes, la obesidad y las enfermedades cardiovasculares

Conclusiones sobre los efectos de la fructosa procedente de azúcares añadidos en la salud

La fructosa es ampliamente utilizada en los alimentos y bebidas (especialmente en forma de jarabe de maiz alto en fructosa) debido a su poder edulcorante y su bajo costo. Además se sabe que la dependencia que la fructosa crea al consumidor, hace difícil reducir o disminuir su consumo en la dieta.

La evidencia científica está demostrando que la fructosa puede tener un efecto directo sobre la indicencia de hígado graso (que puede derivar en cirrosis hepática), niveles altos de triglicéridos en sangre (lo cual puede contribuir a la enfermedad cardiovascular), resistencia a la insulina (que puede provocar diabetes tipo 2) y aumento del apetito (que obviemente puede producir obesidad).

Conclusiones sobre los ácidos grasos

Numerosos estudios han demostrado que la grasa saturada aumenta el riesgo (y la poliinsaturada reduce) de padecer enfermedades, especialmente de tipo cardiovascular. Esto ha influido en que agricultores e industria alimentaria hayan aumentado la producción de aceites vegetales ricos en grasa poliinsaturadas, como la soja, el girasol y el maíz.

Estos ácidos son parte importante de la dieta, pero el equilibrio entre dos tipos de ácidos grasos poliinsaturados (omega 3 y 6) en la dieta actual, es muy diferente al observado en las dietas durante la evolución humana. Mientras que antes contenían una parte de omega-3 por cada 4 de omega-6, en la actualidad llegan a contener entre 50 y 100 veces más de omega-6 que de omega-3.

Este desequilibrio es típico de las dietas occidentales, y cada vez más en las dietas de todo el mundo, además se asocian a un mayor riesgo de padecer enfermedades cardiovasculares, obesidad, diabetes tipo 2 y cáncer de mama y próstata, particularmente en individuos genéticamente predispuestos.

Conclusiones sobre el valor calórico de los alimentos

Aunque la cantidad de calorias de diferentes nutrientes sean las mismas, pueden diferir en sus efectos sobre el peso corporal. Por ejemplo, se sabe que la fructosa aumenta el apetito de forma más eficaz que la glucosa, por lo tanto una caloría de fructosa es más obesogénica (aumenta el riesgo de obesidad) que una caloría de glucosa. Del mismo modo los ácidos grasos omega-6 pueden ser más obesogénicos que los ácidos grasos omega-3.

Recomendaciones dietéticas

Después de haber repasado este informe al detalle, se llega a la conclusión de que la dieta actual debe cambiar en los siguentes aspectos:

  • Se debe reducir el consumo de productos elaborados y procesados por sus elevados contenidos en aceites vegetales, algunos de ellos saturados y otros poliinsaturados, pero muy ricos en omega-6.
  • Disminuir el consumo de bebidas, refrescos y alimentos edulcorados con fructosa o sus derivados.
  • El consumo adecuado de ácidos grasos poliinsaturados omega-3 omega-6 debe ser en una proporción de 1:4.

Fuente:

Simopoulos A, Bourne P, Faergeman O. Informe de Bellagio sobre agricultura saludable, nutrición saludable,
población saludable. Nutr Hosp. 2013;28:1761-69

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